Hablar,
por hablar, preguntar “Hola, ¿qué tal?”.
Cuantas
veces nos ha pasado eso con la persona que nos gusta tanto y no puede salir de
nuestra cabeza, y cuando te arrancas a soltarlo todo es algo como:
- Mira es que yo y tú pues nose, es que tú,
puede que tú…
- ¿Qué?
- No, nada que a ver si te veo.
Y luego
es -que ridículo más grande acabo de hacer- con lo fácil que es:
“Me gustas, puede que pienses que estoy tonto
y me da igual lo que piensen los demás”.
Puede
que la jugada salga bien, mal o fatal pero si sale bien, serás más feliz que
una perdiz, no se ese miedo que os entra cuando se os cruza la persona que
dices ESTA SI ES, es un acojono enorme, porque a esta no te la quieres tirar y
ya, con esta quieres dormir pa’ siempre, compartir momentos, cigarros y birras,
fumaros la distFOLLAR, lógicamente también haréis eso. Como decía un amigo mío:
“Yo no hago el amor, yo follo”.
Porque ¿a
quién no le gusta eso? JAJAJA (siempre
acabo pensando en lo mismo).
Tú, la
persona que está ahí leyendo esto, porque no vas a hablar con la persona que te
gusta y le dices:
“Ven que te coma to' la boca.”
Así,
sin más ni más, es lo fácil, sencillo, eficaz y si la jodes, a joderse y si
aciertas, ya puedes sonreír.
Ya me
contaréis si os a funcionado, saludos.
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