domingo, 11 de agosto de 2013

Noches de desenfreno... Mañanas de Ibuprofeno.



Domingos, que decir de esos días del “señor”, un domingo que puede doler, como dijo un grande:

“Anoche no fui yo, fue el señor JB” - (La Fuga)

Hoy no me puedo levantar (¿eso también os suena eh?). Domingo asqueroso total, dolor de cuello pa’ arriba y de barriga, no sabes ni pa’ donde estás canteao, comes lo mínimo y toma ración de ibuprofeno, haces el zombi lo poco de mañana que queda, comes con todo tu señor careto y a sobar, estás mejor pero sigues siendo un zombi, ducha fría y espabilas, te pones delante del PC y piensas ¿qué pollas hago? Twiter, Youtube, Face, Blogger… pero nada te convence, entonces vas y enchufas la Play3, un vicio, te entretiene durante media hora, te fumas un cigarro con toda tu boca pastosa y seca, porque los domingos bebes más agua que a lo largo de toda la semana.

Te pones a darle vueltas al coco ¿Qué hice yo anoche? Yo te lo digo, beber, fumar, beber, fumar, beber y en mi caso, patear sillas y hacerte un corte de 2.5 cm 6 puntos y tan agusto, encima te acuestas  a las 6 de la mañana y el dolor de todo te dice a las 11 y media que te levantes porque a él le sale de la polla y claro, pues mueres lenta y dolorosamente gracias a esa “bendita resaca”.

Pero, ¿que sería un Domingo sin resaca? Yo ya estoy más que acostumbrado, jode un día a la semana pero eso quiere decir que el Sábado fue grandioso, reíste, gritaste, cantaste, gozaste con los colegas, y tú quejándote de la resaca, pero poco piensas en lo bien que lo pasaste la noche antes que en realidad es lo que importa, tu gente, las risas y saber que siempre van a estar ahí.

Aquí os dejo, y me despido de la resaca hasta el domingo que viene. O quizás nos veamos antes…



Saludos y gracias por leerme.

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