martes, 27 de mayo de 2014

Joder, que guarradas...

Os prometí un blog chulo para ayer, como soy así, lo hago hoy y porque varias personajillas me obligan a ello. Esto se me ha ocurrido a mí, aun que tuve algo de ayuda en plan una “musa pelirroja” que vino a verme hizo que se me ocurriera, comencemos…

Sábado de concierto, de quién iba a ser si no que de los Reyes de Extremadura, Extremoduro nos esperaban con ansia, y más aún nosotros a ellos, todo planeado, birra en la nevera, amigos llegando, dan las cinco de la tarde y suena el típico “phss” de latas y litronas al abrirse, ríos de cerveza nos empiezan a inundar y hora y algo más tarde nos vamos al lugar propio de dicho concierto, te pones en la cola, y sigues agarrando por el culo a esa rubia que tanto refresca… y de repente... La ves, ves a esa chica, camiseta de Extremoduro, agarrando una birra, riéndose con sus amigas, y porque no decirlo, ese culito respingón que tanto te gusta…

No la conoces, ni ella a ti, es la primera vez que cruzáis las miradas, bueno, tú la cruzas en su culo, ella aún no te ha visto, pero harás lo que haga falta para que te vea, ya tienes otro objetivo más para la noche, amigos, Extremoduro, birra y ella.

Llega un punto, que de lo embelesado que estás, tus amigos te dicen que si te has ido a las nubes, que llevas bebiendo de una litrona vacía durante cinco minutos, y se te pasa un poco la historia, sin dejar de darle vueltas a ella, claro.

Se abren las puertas, no la pierdes de vista, o intentas no hacerlo, es imposible con 15.000 personas ahí, según entras, te pones a dar vueltas como un loco, como vas a localizarla, toda la gente bebe birra y tiene camisetas de Extremoduro, estás jodido, desesperas y vuelves con tus amigos donde estáis todos juntos.

Cuando te quieres dar cuenta, ves un culo que te parece familiar, ¿os imagináis quién era no? Pues sí, era ella y la tenías a un par de metros como mucho, pues nada, un buen lingotazo, a irse preparando, la noche prometía y más cuando ella se giró y te vio mirándola, pero antes que mirarte mal, lo que hace es sonreírte y volverse a girar, esto pinta mucho mejor que bien.

Comienza el concierto, que jodida explosión de sensaciones por todos lados, llantos, lloros, lamentos, sonrisas, saltos euforía, todo junto, una explosión en tu cuerpo inmensa pero, ¿cómo está ella? Igual que tú, aparte de todo lo anterior, encima lo vive más que tu, te estás empezando a volver loco…
Y suena, suena, suena, esa canción perfecta, una de muchas de las que tiene y la miras, te mira, y la coreáis juntos con una pedazo de sonrisa enorme en vuestras bocas, tú completamente decidido, te acercas, y te pones a saltar junto a ella, la cerveza en todo esto ha ayudado y no poco, saltáis, gritáis, sonreís, cantáis, se acaba la canción, y te presentas, dos besos y un qué tal, y comienzan a sonar los acordes de golfa, os miráis y vuelta a saltar, pero esta vez con una diferencia, muy juntos, demasiado juntos, roce serio, pero no importa, hay que saltar y punto…

Que cansancio, dios, pero suena puta, más euforia y que haces, la agarras, te la pones a hombros y ahora mismo ella es la Diosa del concierto, Diosa Pelirroja, por cierto… Según la bajas vuestros labios pasan demasiado cerca y como buen caballero, pides perdón, pero ella, sonriendo dice, no hubiera pasado nada y te quedas como, no sé ni cómo explicarlo, vosotros me entendéis…

Suena Su culo es miel, con esa gran voz que tiene Robe, esas cuerdas mágicas que maneja Iñaki, cantando, sonriendo, como antes, pero esta vez, no te andas cortando, cuando la canción dice “Su culo, yepa, su culo es miel”, es tu momento, ¿y qué haces? Ni corto ni perezoso le pellizcas el culo, te mira y sonríe, y ella, en el bis, hace lo mismo, todo va corrido, piensas…

Suena Desarraigo, y su melódica instrumental, y llega la frase de “cuando besa, besa, besa” pues vas a eso, a besarla pero no a joder lo que va tan bien, un besazo en el moflete y te sonríe, una sonrisa que deslumbra al mismísimo Robe…

Llega, el culmen del concierto, BRIBRIBLIBLI, y esa sí que es de gozarlo, estás a tu bola, saltas, brincas te dejas la voz ahí y cuando menos lo esperas, te muerde el moflete y flipas en colores, la miras a esos preciosos ojos oscuros, y le sacas la lengua, porque sí, porque puedes… Mientras la agarras de la cintura y seguís saltando y gritando como locos, claro, la gravedad es lo que tiene y tu mano baja poco a poco hacia su… Culo, sí, su culo, y ella, sin vergüenza alguna te lo dice, te dice algo como “aún no tienes permiso en esa zona” riéndose, la jodia, para que te aguantes las ganas que tienes de agarrarla como no lo has hecho nunca.

Descanso, te la llevas, la invitas a un litro, habláis un rato tranquilamente, lo bien que lo estáis pasando, y disfrutando, os vais a vuestra zona, con los litros, empezáis a beber tranquilos y de repente suena… SO PAYASO, dios mío, genial, es la clave, hay que hacerlo, empiezas a cantar en su oído, “puede que me deje llevar, puede que levante la voz…” te mira, te callas y ella continúa hasta la parte “y te comienzo a besaaaaaaaaaaaaaar” y ¿por qué hasta ahí? Porque te mordió los labios como nadie lo había hecho antes.
De ahí, Robe es casi uno más de los de tu alrededor, no os separáis en lo que resta de concierto y tu mano, ya tiene perfecto para acercarse a ese culo tan perfecto…

Mientras ella hace lo mismo, y hace que te pegues junto a ella, todo lo posible, exacto, como dirían en mi pueblo, “arrimando cebolleta”, pues si, señores, llega la parte caliente del asunto, y tú, claro, en tu puta nube azul, flipando colorines en la calle de la golosina.

Entonces, coges y aprietas bien vuestras dos cinturas, pa’ que no corra ni el aire entre vosotros, y su mano entra, en parte, por tus pantalones y te agarra bien el culo, y tú, pues claro, a ti que te quiten lo bailao, haces lo mismo, y ves como ella, empieza a disfrutar más aún si cabe…

Poco a poco el concierto llega a su fin, tú sigues a tu bola, ella, que no tiene donde dormir, ya que venía de lejos, no te quedan más cojones, que por obligación, invitarla a dormir contigo, llegáis a casa, estáis solos, abres otro litro, ya para culminar la noche, destrozados, se acaba el litro, y lástima que solo haya una cama en tu casa, ¿no?, no hizo falta ni ofrecerla, simplemente preguntó “¿cuál es tú habitación?” y se fue a la cama mientras recogías el salón, vas a tu habitación, ves su ropa por el suelo, te desvistes y…


JODER QUE GUARRADAS CONTIGO.

PD: Si queréis el final pedirlo, pero no pienso cortarme si lo hago.

domingo, 25 de mayo de 2014

Sé...

Hey.

Estoy en un punto de mi vida, en el que hay mucho que ganar, pero mucho más aún que perder, la vida ahora mismo no me sonríe, o no tiene ganas de hacerlo, intento lo imposible por que lo haga y no hay forma de tirar hacia adelante con buen pie.

Tuve tan cerca la perfección en todo, que me lo creí, y al final, se escapó, y no hay forma de volverla a encontrar, aunque la perfección no existe, existe tu forma de ver la perfección, yo, por ejemplo, la veo, de esta forma: Currándome las cosas como lo hago y que vayan hacia adelante, pero por mucho que lo hago, no hay ni una mísera oportunidad de que vaya algo bien, llevo tanto tiempo sin una alegría de las buenas que se me ha olvidado a lo que saben.

Probablemente, y cosa que creo, y fijo que es así, soy el culpable de todo lo que me sucede, tanto en el amor, como en “amistades” que parece que siempre fueron un engaño, como en muchas otras cosas, fijo que lo soy, que soy yo el culpable, pero yo hago las cosas bien, porque lo sé, o al menos, las hago como creo que están bien.

No sé si tengo o he tenido malas elecciones, o no, creo que no me confundí, pero, en mi cabeza es tan claro y luego tan oscuro que no se la realidad. Solo quiero pensar, que esto es una mala racha, que hay que pasar, pero cuánto durará, hago lo posible por que pase rápido, intentando hacerme feliz, ser ese chico inocente, que sonreía por que sí, que era tan feliz que todo le importaba nada, ese chico del que tanta gente estaba orgulloso de conocer.

¿No os pasa que queréis hacer las cosas tan bien que todo sale mal? Pues algo así es lo que a mí me sucede, sucede que me canso de ser, hombre, sucede que me canso de mi piel y de mi cara.

Sé que quiero y quién quiero ser, sé que mis sonrisas han sacado muchas más, sé que en parte, lo que estoy recibiendo por otros lados, no es lo que realmente me merezco, sé que la gente habla y muy mal de mí, sé que me importa tanto lo que digan cómo, si el rey se vuelve a tropezar.

Sé que esto tendrá fin, pero también sé que alguien tiene que ayudarme a abrir la puerta para salir.

Sé que hay gente, que le parezco un verdadero idiota escribiendo cosas así, pero mis motivos tengo.

Este es un país libre, hacer lo que queráis, pero que no os vean.


Adiós.